Empleo de emergencia
Empleo de emergencia
El PIIE apoya a los gobiernos para que generen oportunidades de empleo en respuesta a las demandas derivadas de las crisis. Estos esfuerzos no sólo dan lugar a la creación de infraestructuras de calidad, sino también a la mejora del rendimiento de otros sectores como la agricultura, el medio ambiente, el transporte y el comercio y la industria.
El empleo inicial de emergencia a corto plazo transita hacia un enfoque más integrado a medio y largo plazo para recuperarse de futuras crisis y estar mejor preparados para ellas. A lo largo de los años, los enfoques del PIIE para el desarrollo de infraestructuras han demostrado su eficacia tanto en la preparación para las catástrofes como en la contribución a la prevención de conflictos, así como durante las obras de recuperación y reconstrucción.
Empleo de emergencia a corto plazo
El PIIE apoya la creación de empleo directo a corto plazo (empleo de emergencia) que proporciona oportunidades inmediatas de ingresos en efectivo a corto plazo a personas o comunidades vulnerables. El trabajo se lleva a cabo principalmente en infraestructuras públicas o comunitarias, lo que responde a las necesidades económicas y sociales inmediatas de las personas afectadas, y apoya la reactivación de la economía y el medio ambiente locales.
El empleo de emergencia hace hincapié en la productividad, el impacto y las condiciones de trabajo decentes. Esto incluye la seguridad y la salud en el trabajo (SST), decir "no" al trabajo infantil, la igualdad de remuneración por un trabajo de igual valor, las salvaguardias para la protección del medio ambiente, los llamados mecanismos de graduación (es decir, la transición hacia medios de vida sostenibles) y la creación de valor patrimonial en las infraestructuras.
La creación de empleo también puede evitar el aumento de las tensiones en las comunidades y contribuir a la cohesión social y al diálogo.
En el caso del conflicto, la provisión de empleo a los desprotegidos también puede contribuir a rebajar la tensión en las comunidades volátiles y a disminuir el riesgo de futuros incidentes. Del mismo modo, en las sociedades en las que las partes en conflicto han prometido recientemente un cese de hostilidades o han firmado un acuerdo de paz, pueden responder a las expectativas de desarrollo de los medios de vida, incluidas las mejoras de las infraestructuras y el aumento de las oportunidades de empleo.
Respuesta a la crisis a medio y largo plazo y reducción del riesgo de catástrofes
Una característica clave de la mayoría de los programas del PPIIE es el compromiso de proporcionar apoyo a largo plazo a través de todas las etapas del proceso de respuesta a la crisis, comenzando durante la fase de emergencia, continuando a través de la fase de recuperación y, posteriormente, transformando el apoyo en ayuda al desarrollo regular o financiación nacional.
La mayoría de los programas de respuesta a la crisis implican una reconstrucción significativa de las instalaciones de infraestructura y, por lo tanto, proporcionan una vía importante para aplicar la combinación única de conocimientos de infraestructura y creación de empleo del PIIE.
El enfoque del PIIE es una forma eficaz de movilizar a las comunidades para que aumenten su resiliencia y restablezcan medios de vida sostenibles en respuesta a las crisis, como las catástrofes naturales, los conflictos y las recesiones económicas. Los campos de acción del programa también contribuyen a evitar (prevención) y limitar (mitigación y preparación) los impactos de las crisis.